La historia de los Juegos Olímpicos

Reúnete con un guía formado por National Geographic y visita el estadio Panatenaico, un estadio de mármol que albergó a los antiguos atletas griegos, así como a los que compitieron en los Juegos Olímpicos de 2004. Construido originalmente para competiciones deportivas y actos oficiales, en el siglo IV a. C., el estadio quedó abandonado durante milenios antes de que un rico benefactor lo restaurase para los primeros Juegos Olímpicos modernos de 1896. En estos juegos se celebraron competiciones de esgrima, gimnasia, halterofilia, etc., en las que participaron unos 240 atletas de 12 países. También tuvo lugar el primer maratón del mundo, ideado por un francés pero que se basa en la historia de un antiguo mensajero griego que, según se cuenta, corrió por las llanuras de Maratón hasta Atenas para anunciar la derrota de los invasores persas.

Continúa hasta el nuevo Museo Olímpico de Atenas, donde verás una exposición de última generación que repasa la historia de los Juegos desde su nacimiento en la antigua Olimpia hasta su resurgimiento en 1896 y su regreso a Grecia en 2004. A través de dinámicas exposiciones digitales e interactivas, aparte de objetos de la antigüedad hasta la época moderna, podrás profundizar en las historias de famosos atletas y en el importante papel de los deportes y las Olimpiadas en la evolución de la ciudad.

La última parada será el complejo olímpico de Atenas, la principal instalación deportiva moderna de la ciudad, que fue rediseñada a fondo por el famoso arquitecto español Santiago Calatrava para preparar los Juegos Olímpicos de Verano de 2004. Aquí, gracias a un acuerdo especial, te reunirás con un antiguo atleta olímpico para visitar las instalaciones y conocer su punto de vista personal sobre los Juegos. Mientras caminas por el Muro de las Naciones de Calatrava y entras en los estadios y pabellones donde compitieron los mejores gimnastas y velocistas del mundo, podrás hacerte una idea de cómo es la vida cotidiana de un atleta olímpico y de lo que supone participar en los Juegos.

Llévate a casa tu propia medalla olímpica por participar en esta experiencia, además de una fotografía conmemorativa para no olvidarla.